Los cárteles mexicanos, en concreto el cártel de Sinaloa, La Familia Michoacana, los Caballeros Templarios y la organización Beltrán Leyva, se han arraigado firmemente en la frontera norte de EE.UU., llegando hasta Canadá,informó este miércoles Dave Rodriguez, director del Área de Alta Intensidad de Tráfico de Drogas (HIDTA, por sus siglas en inglés), al Comité del Senado de EE.UU. sobre Asuntos de Seguridad Nacional y Gubernamentales. En particular, el fenómeno se da en la frontera entre el Estado de Washington y la provincia canadiense Columbia Británica.
Northwest HIDTA Border Task Force
Dichos cárteles transportan grandes cantidades de cocaína y metanfetamina a través de inmigrantes ilegales, familias criminales, e incluso personas del sector agrícola. En algunos casos pasar las drogas de EE.UU. al norte es una tarea muy fácil: basta con arrojar una bolsa con drogas al otro lado.
Los cárteles usan también helicópteros, aviones y barcos, entre otras vías de tráfico convencionales. Es probable que en un futuro empiecen a usar también drones, aunque hasta ahora ninguno ha sido ha sido detectado. Además, los cárteles mexicanos llegan a Canadá directamente a través del mar o del aire sin entrar en territorio de EE.UU.
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