Los concursos de oratoria y ciertas clases piden a menudo discursos improvisados. Con ésta guía, incluso aquellos con pánico escénico tendrán éxito.

Pasos

1

Acostúmbrate a hablar en frente de las personas. La verdad, es que incluso los oradores más calmados tiemblan cuando suben al escenario. Sitcom stars aún se pone nervioso en episodios en vivo.

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2

Recuerda tu audiencia, siempre haz contacto visual con ellos. No sólo evitarás que la audiencia se duerma, también te mantendrá con más confianza. Si ves a un joven que no está prestando atención y está haciendo burla, sólo ignóralo. Si no puedes verlos a los ojos, mírales la frente.
3

Trata de envolver a la audiencia. Si has escuchado a alguien que tartamudea, no mira al frente y es totalmente aburrido, sabes lo horrible que es. Trata de animar a tu audiencia.
4

Dale vuelta a tu tema. Si tienes un tema que no puedes relacionar con nada, trata de transformarlo en algo que esté vagamente relacionado, pero lo suficiente relacionado para que tenga sentido.
5

¡Incorpora el humor! Haz reír a las personas y ellos automáticamente se envolverán en tu discurso. Si no estás seguro de la broma, si es racista o puede que hiera los sentimientos de alguien, no la hagas.
6

Si estás dando un discurso improvisado de seriedad, ten confianza en ti mismo. Pecho fuera, espalda recta, ojos al frente. Te dará un aire de significancia y te verás un poco intimidante también.

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Trata de leer muchos libros en una gran variedad de temas, te dará ideas y ejemplos para incorporar a tu discurso.
Apasiónate por tu tema, tienes que abrazar lo que estás hablando con tus brazos abiertos.
Pretende llegar a 4 buenos puntos.
El lenguaje dice mucho. ¡Actúa como si estuvieras lleno de confianza!
Toma ventaja de una audiencia entusiasta. Recuerda, media vez te ganes a la audiencia, te ganarás a los jueces/maestros.
Habla a un ritmo regular, no te apresures. Recuerda respirar.
Cuando te prepares, escribe un par de oraciones en cada punto de tu lluvia de ideas.
Una buena forma de practicar tu discurso improvisado, es proponer un brindis en las fiestas.
Trata de legar a 1 minuto 10 segundos.
¡Los improvisados NO tienen que ser exposiciones!

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Asegúrate que no haya nada en tu apariencia que pueda avergonzarte. Ten un amigo confiable (o mejor aún, un espejo) que te diga si tienes algo en tus dientes/frenillos. Asegúrate de no tener papel higiénico en tus zapatos, etc.
Ten cuidado de no decir algo ofensivo. No sólo puede afectar tu puntaje en las competencias, también puede hacerte ver como una mala persona.
Si no sabes que decir, asegúrate de no usar un discurso repetido. Al juez no le gustará.

Los concursos de oratoria y ciertas clases piden a menudo discursos improvisados. Con ésta guía, incluso aquellos con pánico escénico tendrán éxito.

1

Acostúmbrate a hablar en frente de las personas. La verdad, es que incluso los oradores más calmados tiemblan cuando suben al escenario. Sitcom stars aún se pone nervioso en episodios en vivo.

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2

Recuerda tu audiencia, siempre haz contacto visual con ellos. No sólo evitarás que la audiencia se duerma, también te mantendrá con más confianza. Si ves a un joven que no está prestando atención y está haciendo burla, sólo ignóralo. Si no puedes verlos a los ojos, mírales la frente.
3

Trata de envolver a la audiencia. Si has escuchado a alguien que tartamudea, no mira al frente y es totalmente aburrido, sabes lo horrible que es. Trata de animar a tu audiencia.
4

Dale vuelta a tu tema. Si tienes un tema que no puedes relacionar con nada, trata de transformarlo en algo que esté vagamente relacionado, pero lo suficiente relacionado para que tenga sentido.
5

¡Incorpora el humor! Haz reír a las personas y ellos automáticamente se envolverán en tu discurso. Si no estás seguro de la broma, si es racista o puede que hiera los sentimientos de alguien, no la hagas.
6

Si estás dando un discurso improvisado de seriedad, ten confianza en ti mismo. Pecho fuera, espalda recta, ojos al frente. Te dará un aire de significancia y te verás un poco intimidante también.

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Trata de leer muchos libros en una gran variedad de temas, te dará ideas y ejemplos para incorporar a tu discurso.
Apasiónate por tu tema, tienes que abrazar lo que estás hablando con tus brazos abiertos.
Pretende llegar a 4 buenos puntos.
El lenguaje dice mucho. ¡Actúa como si estuvieras lleno de confianza!
Toma ventaja de una audiencia entusiasta. Recuerda, media vez te ganes a la audiencia, te ganarás a los jueces/maestros.
Habla a un ritmo regular, no te apresures. Recuerda respirar.
Cuando te prepares, escribe un par de oraciones en cada punto de tu lluvia de ideas.
Una buena forma de practicar tu discurso improvisado, es proponer un brindis en las fiestas.
Trata de legar a 1 minuto 10 segundos.
¡Los improvisados NO tienen que ser exposiciones!

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Asegúrate que no haya nada en tu apariencia que pueda avergonzarte. Ten un amigo confiable (o mejor aún, un espejo) que te diga si tienes algo en tus dientes/frenillos. Asegúrate de no tener papel higiénico en tus zapatos, etc.
Ten cuidado de no decir algo ofensivo. No sólo puede afectar tu puntaje en las competencias, también puede hacerte ver como una mala persona.
Si no sabes que decir, asegúrate de no usar un discurso repetido. Al juez no le gustará.